24 abril 2011

Pogrom

Mis bisabuelos Mauricio Raboy y Fanny Kovalivker, eran de un pueblito llamado Kaminka, en Ukrania. Murieron en un Pogrom, una especie de linchamiento antisemita masivo, ocurrido en 1921. Mi abuelo Noé, al que todos llamaban Ñuque, tenía entonces, aproximadamente ocho años, y fue el único sobreviviente de su familia. Unos años después, siendo todavía niño, viajó solo, en camión, tren y barco, hasta la lejana Argentina, donde lo esperaba una tía, que lo crió como si fuese uno más de sus cuatro hijos. Ñuque nunca habló de su pasado, de su vida en Rusia, o de su familia, ni tampoco sobre lo ocurrido. Se guardaba bien adentro el dolor, no quería recordar. Jamás volvió a hablar su lengua natal.
Yo, no llegué a conocerlo, murió bastante joven, de diabetes, cuatro años antes de que yo naciera. 
El signo trágico de su historia, parece repetirse en la mía. Pero yo, no me voy a guardar el dolor, no me voy a quedar callada.