Hace unos días una compañera, hija de desaparecidos, decía que está estresada porque la moviliza hasta las entrañas su juicio, que se está desarrollando.
Y yo me acordaba de cuando nos estresaba la impunidad total y la sensación de no futuro. Que estrés esperado, este; positivo...
Y tomando prestadas las palabras de otra amiga, también hija de desaparecidos, también conmocionada por su juicio a punto de empezar:
"-Por un bicentenario sin impunidad para los genocidas-".
Salúd.