Una cosa es trabajar con el objetivo de dar y otra cosa muy distinta es trabajar en función de algo que se desea recibir. No sé dónde lo habré aprendido, pero sé bien de qué lado estoy. Yo, por mi, nada. Mi motor es otro. Y el tiempo, es para dejar mis semillas bien plantadas, fértiles.
Es sabido: por más que lloremos, chumbemos o pataliémos, la ventanilla de reclamos está siempre cerrada.